¿Por qué es importante identificar si mi hijo/a tiene problemas de audición antes de acudir a terapia de lenguaje?
Los problemas de audición afectan el lenguaje, ya que los niños al no escuchar los sonidos de la voz no se retroalimentan con ella, por tanto no desarrollan adecuadamente su lenguaje.
En general, resulta difícil detectar el trastorno ya que los niños que los sufren aprenden a compensar su falta de audición al volverse más sensibles a otros tipos de señales informativas a su alrededor, como por ejemplo, los cambios de luz al abrir o cerrar una puerta, las vibraciones del suelo y los movimientos del aire.
Además, la pérdida de esta capacidad sensorial suele pasar inadvertida en los primeros meses de vida ya que es asintomática en una fase inicial, previa al lenguaje.
CAUSAS DE LA PÉRDIDA AUDITIVA
Puede ocurrir la pérdida de audición si un niño:
- Nació de manera prematura.
- Permaneció en la unidad de cuidados intensivos neonatales (NICU).
- Tuvo complicaciones en el parto.
- Si la madre tuvo Rubeola durante el embarazo.
- Recibió medicamentos que pueden causar la pérdida de audición (ototóxicos)
- Tuvo una alta concentración de bilirrubina y necesitó una transfusión.
- Tiene antecedentes familiares de pérdida de audición infantil.
- Estuvo expuesto a sonidos o ruidos muy fuertes, incluso por un tiempo corto, o a una exposición breve a sonidos de impacto repentino.
- Tuvo infecciones frecuentes en los oídos.